[Hamtaro,]

(Sutíl aclaracion: Imagen superior sera usada hasta que sea conveniente)

Me mantuve un buen rato viendo la luna y luego, ya al sentirme cansado, me escabullí a mi habitación. Me acosté en mi cama y cerré mis ojos, comenzando a llorar levemente al hundirme en mis pensamientos. Sentí un apretado abrazo alrededor de mi cabeza, tapando mi boca y mi nariz con una suave piel. Sentí el latido de un corazón, sentí manos acariciando mi espalda con gentileza. Una de esas manos luego acaricio mi cabello… y… finalmente pude sentir aquellas cosas que había dejado de sentir… hacía ya tantísimo tiempo…

“Madre… viniste otra vez por mi…” –dije mientras mis brazos la rodeaban. “Me siento protegido así, mama… ¿dormirás conmigo hoy?” –pregunte, aun sintiendo como unas pocas lagrimas caían de mis ojos. “Si, mi amor. No te preocupes… estoy aquí para protegerte.” –escuché.  Mi boca mostro una leve sonrisa y mi cuerpo se apegó al suyo… mi cara escondiéndose en su pecho…

… “No te imaginas… lo feliz que estoy de verte… lo feliz que estoy de al fin ver a mi verdadero hijo…” –resonó en mi cabeza, mientras me acariciaba… “No te preocupes… no tienes por qué usar ese disfraz nunca más…” –no pude aguantar mucho tiempo… finalmente me dormí…

A la mañana siguiente, desperté a duras penas. Recordé que había que estudiar sobre “Succubus e Incubus”, pero… estaba algo dormido todavía… y no quería mostrarme con esta apariencia… "No quiero salir... pero a la vez tengo hambre..." -murmuré.