Cuando estaba terminando de hablar con Hanabi un chico de mi clase se me acerca, me parecía un chico rudo y fuerte, capaz de proteger a alguien, eso me pareció desde que lo vi en la clase por primera vez. El chico se presentó como Lisandro, que bello nombre pensé al oírlo, después me dijo - se me hace imposible ignorar que estás herida - por lo que le respondí, - hola, soy Yuuki, si, este es el resultado de adentrarte en el bosque sin saber sus peligros, pero gracias a Hanabi ya no siento mucho dolor y pronto estará mejor -. Después continuo hablando, - me preocupa tu estado sin saber la dificultad de la prueba, no te pediré que te retires de la actividad hoy, ya que no tengo autoridad para ello e imagino que es algo importante para ti, sin embargo me gustaría darte un consejo - aún que no parecía, cuando mencionó la palabra "consejo" le puse más atención, pues sabía que eso seguramente me serviría, sobre todo en mi estado. - puede que te parezca grosero como lo digo, pero verás que es útil, tienes una habilidad muy versátil, me gustó tu trabajo en la clase anterior y se ve que esa esfera pequeña la dominas a la perfección, es por eso que te sugiero no confiarte solo en la potencia, con un voltaje moderado en el lugar correcto podrías aturdir o hasta causar parálisis, por ejemplo si le das en la nuca o al pecho cerca del corazón, piénsalo -.
Deje que terminará de hablar y escuché atenta sin voltear la mirada a otro lado como acostumbro hacer mientras hablo, cuando termino pensé un momento en lo que dijo y contesté - eres muy amable, voy a tomar tu consejo, y tranquilo, aún tengo una mano sana, y digamos que soy buena en las artes marciales, mi abuelo es el maestro Hisao Cross él mismo me entreno así que se que seré capaz de defenderme, quizá hayas escuchado hablar de él, es muy famoso, daré todo de mi, se que estaré bien, y debo de hacerme más fuerte, a eso he venido a este lugar - dije con una mirada decidida. - Pero, Hanabi, te pido que cuides de ella, yo no seré útil por ahora - dije un poco decepcionada.