18-10-2021, 02:19 AM
No pasé la experiencia de ser discriminado o mirado mal por gustarme el anime o los videojuegos. En los grupos que estuve siempre hubo una o más personas que compartían esos gustos.
En la escuela, prácticamente TODOS éramos gamers. No veíamos la hora de juntarnos luego de clases para viciar a algo o ir al ciber. De vez en cuando también jugábamos fútbol para variar, pero a lo que voy es que no había manera de que nos miremos mal entre nosotros por nuestros gustos. En cuanto a anime, la mayoría crecimos viendo Saint Seiya, Dragon Ball, Captain Tsubasa. Hoy en día varios de mis ex compañeros siguen poniendo memes de DBZ en sus estados de wsp como si fuese lo mejor que jamás haya existido. Es cierto que fuimos menos los que nos interesamos en seguir conociendo series, pero me acuerdo de haber compartido una charla con un compañero y la profe de dibujo sobre Evangelion. Resulta que los tres éramos muy seguidores de esa serie. Nunca llegué a la afición de hacer cosplay ni llevar ropa o accesorios; no porque me de vergüenza. Me hubiese encantado tener una mochila de Nerv y la llevaría con orgullo, pero no se dio. Siendo también metalero era más fácil encontrarme con remera de Maiden y mochila de Angra.
La facu fue casi una extensión del secundario. Estaban los que seguían respetando las series de la infancia y también había algún gamer, aunque no teníamos tanto tiempo para ponernos a hablar de esas cosas. Y el ámbito más complicado podría haber sido mi primer trabajo por mucha gente mayor. Sin embargo, en el sector en el que estaba yo había otro flaco de mi edad a quien también le gustaba el anime y sobre todo los videojuegos. Diría que él era más gamer que yo porque se mantenía comprando consolas cuando por mi parte me empezaba a quedar en el tiempo y darle a full a la PC.
Por el lado de los desconocidos no había manera que me dijeran nada porque, como explicaba, si no se ponían a hablar específicamente del tema yo no andaba a los gritos "ME GUSTA EL ANIME", "SOY GAMER" ni llevaba nada que me identifique como tal. Igual me cuesta creer que alguien reaccione mal por ver a otro con esas aficiones. Debería ser un cosplay muy exagerado para que algún intolerante empiece a ponerse pesado.
En la escuela, prácticamente TODOS éramos gamers. No veíamos la hora de juntarnos luego de clases para viciar a algo o ir al ciber. De vez en cuando también jugábamos fútbol para variar, pero a lo que voy es que no había manera de que nos miremos mal entre nosotros por nuestros gustos. En cuanto a anime, la mayoría crecimos viendo Saint Seiya, Dragon Ball, Captain Tsubasa. Hoy en día varios de mis ex compañeros siguen poniendo memes de DBZ en sus estados de wsp como si fuese lo mejor que jamás haya existido. Es cierto que fuimos menos los que nos interesamos en seguir conociendo series, pero me acuerdo de haber compartido una charla con un compañero y la profe de dibujo sobre Evangelion. Resulta que los tres éramos muy seguidores de esa serie. Nunca llegué a la afición de hacer cosplay ni llevar ropa o accesorios; no porque me de vergüenza. Me hubiese encantado tener una mochila de Nerv y la llevaría con orgullo, pero no se dio. Siendo también metalero era más fácil encontrarme con remera de Maiden y mochila de Angra.
La facu fue casi una extensión del secundario. Estaban los que seguían respetando las series de la infancia y también había algún gamer, aunque no teníamos tanto tiempo para ponernos a hablar de esas cosas. Y el ámbito más complicado podría haber sido mi primer trabajo por mucha gente mayor. Sin embargo, en el sector en el que estaba yo había otro flaco de mi edad a quien también le gustaba el anime y sobre todo los videojuegos. Diría que él era más gamer que yo porque se mantenía comprando consolas cuando por mi parte me empezaba a quedar en el tiempo y darle a full a la PC.
Por el lado de los desconocidos no había manera que me dijeran nada porque, como explicaba, si no se ponían a hablar específicamente del tema yo no andaba a los gritos "ME GUSTA EL ANIME", "SOY GAMER" ni llevaba nada que me identifique como tal. Igual me cuesta creer que alguien reaccione mal por ver a otro con esas aficiones. Debería ser un cosplay muy exagerado para que algún intolerante empiece a ponerse pesado.