26-03-2019, 08:32 PM
Confieso que hace unos 10 años, durante un momento que estuve sola en la casa, se me ocurrió concentrarme con la idea de abandonar el cuerpo. Cuando abrí los ojos ví el cielo del techo y al mirar abajo me ví a mí misma sentada. Todo enrededor estaba nebuloso, me asusté e hice el ademán de ir hacia abajo a tocar la cabeza de mí misma que veía abajo. Cuando volví a abrir los ojos, me dolía el corazón, dí una bocanada de aire porque me estaba asfixiando, estaba sudando frío, tenía un dolor de oídos y los pies helados como témpano. Nunca mas volví a intentar hacer lo mismo.