En lo personal no me interesa mucho la edad de los seres con quienes me relaciono, creo que uno se puede perder de seres interesantes solo por juzgar una edad (aclaro, no en todo se puede aplicar) fuera de eso y en las relaciones interpersonales soy muy selectivo, aclaro que no soy un ser interesante y no pretendo mostrarme de tal manera si no que, es difícil que alguien termine por interesarme por completo a pesar de intentar conocerlo, de igual manera, no establezco estándares sobre el tipo de persona con quien me quiera relacionar, me parece ridículo y muy cerrado hacerlo, lo bueno de conocer personas es apreciar y conocer sus virtudes y sobrellevar sus defectos.
Ahora que lo pienso, nunca lo había pensado ._.
La verdad es que soy introvertida y me cuesta comunicarme con la gente, más que nada expresarme correctamente cosa que ando trabajando y que me ha ocasionado muchos problemas, pero en verdad me llevo bien con todos, tengo amigos por encima de los 30, hablo muy bien con abuelos, niños y gente menor que yo, puedo decir que tengo amigos de todas edades.
Mi circulo social es muy cerrado y estoy conforme con eso
La realidad es que me relaciono indistintamente con gente mayor y menor que yo. Aun así, la experiencia me dice que me llevo mucho mejor con gente que me dobla la edad, como que siento una vinculación más fuerte y me siento más parte de eso. También es el tipo de relación que me lleva más de cabeza, eso también lo admito.
Pero bueno, con gente menor también me llevo bien. No tanto con la gente de mi edad, que ahí siempre hay como más pelea salvo algunas excepciones.
Pues yo suelo relacionarme con personas 2 años menores a mi a lo mucho o de mi misma edad, aunque por mi trabajo hace poco he estado relacionándome con personas mayores xD.
Con muy poca gente llegando a ser antisocial pero normalmente me llevo muy bien con el sujeto mas parlanchin y bueno luego de un par de cervezas el parlanchin soy yo :v
Literalmente con cualquiera que sea minimamente interesante, ya sea con sentido de humor o que sepa algo que yo no. En lo personal amo las conversaciones superfluas así como las recesivas limitadas a solo oir, si es que la otra persona demuestra conocer de un tema. Soy de aquellos a los que le encanta escuchar a otra persona hablar de sus pasiones sabiamente, tiendo a llenarlas de preguntas.
Yo me relaciono con cualquier persona, todos alguna vez tienen algo que contar, y en mi trabajo pues hay de todo, más chicos, de mi edad y mayores, y cuando me cuentan algo les presto atención y aprendo
Creo que si hubiera contestado esta pregunta hace algunos años, me quejaría de lo superficiales que son las personas y lo difícil que sería para mi congeniar con la mayoría.
Pero ahora siento que no me molesta relacionarme con cualquier persona, siempre y cuando no estemos hablando de alguien malintencionado o hipócrita.
Y como normalmente me la paso diciendo tonterías, diría que me gustaría ser amiga de cualquier persona que tenga un sentido del humor agradable y pueda expresarme sin temor a ser juzgada por esas mismas tonterías (???)
06-03-2019, 07:31 PM
(Última modificación: 06-03-2019, 07:34 PM por Heaven.)
A mi siempre me costo relacionarme con la gente, quizas por un medio virtual menos
por el hecho de no poner la "cara" y que eso me genere menos pena, pero me suele
invadir de vez en cuando la vergüenza...al rato de agarrar confianza eso cambia
porque me siento a gusto con la gente.
Muchos dijeron lo de la edad y que se relacionan con gente mayor, les doy la razón
porque yo tengo amistades mucho mas jóvenes que yo jajaja, pero la edad no tiene
nada mas que una diferencia de números con las amistades que se pueden llegar a formar.
Saludos...!!!
Depende mucho de la persona, el lugar de donde sean, y muchos factores que no alcanzaría a detallar. Las personas son un mundo, y a veces hay que tener el interés para descubrirlo, y nada más. Antes no me relacionaba con nadie, y no me gustaba siquiera responder a conversaciones. Pero después que me fui a vivir a otro lugar, además de madurar, me di cuenta que muchas personas tienen algo bueno que ofrecer; siempre y cuando sus defectos no sean excesivamente malos, todo sería llevadero. Pero de ahí a entablar una amistad, ya es otra cosa.
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