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Confieso que no tengo por que cuidar de gente que me dobla en edad, si con suerte puedo cuidar de mi misma y mi tortuga.

Confieso en que pienso que no me puede enseñar nada de ética o moral una persona con el cuerpo plagado de tatuajes, con colores estrambóticos en el pelo, media mierda en la cara o que tenga en un altar a personajes como Simone de Beauvoir o el Che Guevara.

Confieso que no sé que tienen que ver los tatuajes, los tintes y "media mierda en la cara" con la ética y la moral. Autores, figuras publicas, y demás relacionados con corrientes de pensamiento, vale, pero lo otro es tan absurdo que no hay ni por dónde cogerlo sin mencionar la palabra prejuicio xD

La piel no tiene que ser un lienzo para llenarlo de figuras, palabras o diseños. Fuera de ella hay espacio de sobra.

Confieso que Neferet es facha, lo cual me da bastante asco

Confieso que la mente no tiene que ser un espacio para llenarlo de conocimiento, ideas y pensamientos. Fuera de ella hay espacio de sobra

Confieso que el calor que hace no es normal.

(26-03-2019, 05:54 PM)Alucard escribió: [ -> ]Confieso que no sé que tienen que ver los tatuajes, los tintes y "media mierda en la cara" con la ética y la moral. Autores, figuras publicas, y demás relacionados con corrientes de pensamiento, vale, pero lo otro es tan absurdo que no hay ni por dónde cogerlo sin mencionar la palabra prejuicio xD

Puede ser un factor, cae en lo probable, aunque no necesariamente o tampoco de manera exclusiva, pero yo me baso en lo práctico, en la vida real el mundo funciona así, y por algo existe el llamado lenguaje corporal.Para mi quienes se llenan de esos atavíos, que no hablo de 1 o dos ornamentos que pueden ser aceptables, bonitos y dependiendo de la zona hasta sexys,  sino que ya se plagan de ellos tienen algún nivel de problema mental no tratado, tal vez un trauma. El sentido común me indica que 2+2 son 4, no 22 ni otro resultado. Esa al menos es mi apreciación personal. 

Lamentablemente vivimos en una época de SJW en que la gente o es indiferente o tiene que callar lo que piensa,  decir lo  que no cree y negar lo que siente. Yo en mi caso no me hago problemas, digo lo que pienso guste o no a algunas personas, no considero ir al choque con eso, mas bien quienes se ofenden con ello diría que tienen un problema mirando solo  de frente  y no a los costados. Bueno, esto para mí resulta en un interesante ejercicio de transparencia. Ya después depende de cada quien si lo toma a bien o a mal, que tampoco me va a quitar el sueño.

Confieso que hace unos 10 años, durante un momento que estuve sola en la casa, se me ocurrió concentrarme con la idea de abandonar el cuerpo. Cuando abrí los ojos ví el cielo del techo y al mirar abajo me ví a mí misma sentada. Todo enrededor estaba nebuloso,  me asusté e hice el ademán de ir hacia abajo a tocar la cabeza de mí misma que veía abajo. Cuando volví a abrir los ojos, me dolía el corazón, dí una bocanada de aire porque me estaba asfixiando, estaba sudando frío, tenía un dolor de oídos y los pies helados como témpano. Nunca mas volví a intentar hacer lo mismo.