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Otra anecdota, esta vez más reciente que la anterior, lo que voy a compartir con ustedes sucedió hace aproximadamente unos 3 años, durante la semana en la cual iba a cumplir 29 añotes.

Desde que yo era niño el día de mi cumpleaños pocas veces ha sido un bueno para mi, por lo general es un día en el que me va mal. Y aunque en algunos años no sucedede esta forma, tambien hay otros en que dicha mala suerte se extiende a toda la semana que rodea al día en que llegué a este mundo y ese año en cuestión estaba resultando ser unos de aquellos en los que me va mal toda la semana, aunque sin ser nada grave solo pequeños detalles.

He de decir que soy mecánico automotriz y trabajo en un taller, en ese hambiente se encuentra todo tipo de clientes desde los que van y te dejan su carro para que lo arregles y no buscan enterarse apenas nada de lo que estás haciendo y por qué lo estas haciendo, hasta los que practicamente quieren quitar los tornillos por ti. Entre estos dos extremos están los platicadores que se quedan a conversar con nosotros los mecánicos mientras su carro es reparado. Un día de aquella bonita semana me toco trabajar el auto de un cliente de estas características y mientras lo hacía el platicaba con mi jefe. Como suele pasar empezaron por qué tal está el trabajo, un detalle u otro del carro y de ahí pasaron a cuestiones de política y finalmente de la vida, entre estos temas que tratan del modus vivendis y el día a día de las personas salió un "dato" curioso. Resultaba que varios conocidos y allegados de ambos, tanto de mi jefe como del cliente y algunas personas cercanas de ellos, habían fallecido en los días previos o inmediatamente posteriores a la fecha de su cumpleaños. Al escuchar esto dije para mis adentros -Que genial tema para tratar al lado de una persona cuyo cumpleaños es esta misma semana y que esta todo el tiempo debajo de carros que pueden caersele encima, con un poco de "ayuda" de alguna fuerza extraña al estilo Destino Final o maldición de Another. Coincidencias de la vida. Esto ocurrió a principios de la semana y mi cumpleaños era el viernes.

Pasaron un par de días, sinceramente no recuerdo si esto ocurrió el jueves o el mismisimo viernes como una gran casualidad -Es un poco raro, ya que me acuerdo de muchos detalles de esa semana pero no del día exacto del hecho que da lugar a esta anecdota, tengo una espina que me dice que fue el viernes pero no puedo asegurarlo- El caso es que, ese día tuvimos mucho trabajo y bastante pesado por lo que la hora de comer se retrazó, como vivo cerca de mi empleo suelo ir a comer a mi casa y eso hice. Una hora despues tras haber comido adecuadamente regrese a trabajar. Cual sería mi sorpresa al encontrar el taller cerrado, pues mi jefe había ido a entregar un carro. Por qué hizo esto si sabía que yo iba a regresar se preguntarán, pues resulta que al poco tiempo de entrar a trabajar ahí me entregó un duplicado de las llaves del taller para que yo pudiera abrir y como respaldo porque el suele perder las suyas; y en esa ocación justo un día antes me las había pedido prestadas pues no encontraba sus llaves, cosa que se le había olvidado antes de salirse y cerrar.
Entonces yo tenía dos opciones: #1 esperar bajo el sol hasta que regresara #2 saltar la barda y abrir, y elegí la 2. Con la decisión tomada fui buscando el punto más acorde para escalar, que era en ese entonces, la esquina que formaban la barda y una reja. A punto de llegar a lo más alto apoyé la mano izquierda y al subir la derecha para impulsarme sucedió.
Por cosas del destino no me dí cuenta de que junto a esa reja bajaban unos cables eléctricos que estaba apoyados justo encima de la barda y al subir la mano los toqué. Sentí inmediatamente la descarga y la electricidad recorrer mi cuerpo. Mi primer impulso fue quitar la mano de ahí, pero no pude, estaba pegado a los cables y en consecuencia pensé -Es todo, hasta aquí llegué- les comentaré también que yo tuve un buen amigo de mi edad llamado José, y que escasamente un año y unos meses antes había fallecido, el motivo fue por una caida de 5 pisos, esto ocurrio porque el vivía en el ultimo piso de un edificio de 6 y en una noche de borrachera se olvido las llaves y trató de escalar hasta su casa con el resultado que ya les comenté. Y en ese momento en que a mi entender mi vida llegaba a su fín pense en el y le dije -sábes qué, Pepe, al igual que tú yo acabo de cometer el error que no debí haber cometido- y entonces lo acepté. Sin rencores, sin tristeza, sin miedo, sin nada más que paz, acepté que iba a morir en ese día, en ese lugar y en esa forma. Si alguna vez uno de ustedes tiene una experiencia de este tipo -creer que tu tiempo de vida se ha terminado, me refiero- no sé cómo lo tomarán pero por mi parte puedo decir que esa fue la ocación que sentí mas paz en toda mi vida hasta hoy.
Pero por romanticos que sean los relatos deben terminar. ¿Cómo estoy aquí hoy si pasó esto? Pues resulta que todos mis pensamientos fueron cuestión de milisegundos, como le dije a una persona a quien le conté esta anecdora recien vivida en ese entonces, me dí cuenta de que pensaba de forma muy lúcida. Si bien no creo que nunca nadie haya estudido un cerebro humano mientras recibe una descarga mortal, dudo mucho que sus pensamientos sean tan lclaros como yo los estaba teniendo. Por lo tanto me dije a mi mismo que la bajada no debía ser de gran voltaje y si bien ya me había dado por muerto, si en realidad no tenía la capacidad de matarme, no pensaba quedarme ahí haciendo el subnormal como dicen los españoles. Luche con todas mis fuerzas por despegar mi mano y lo logré, termine de subir, salté la barda y abrí el taller, quedandome de mi hipotética muerte esta anecdota y una ampoya en la mano derecha que desaparecio con el tiempo.

Y eso es todo lo que quería compartir, al menos por el momento. El como una descarga y un poquito de sugestión me hicieron creer que antes de los 30 me iba a mudar al otro barrio.

Yo recuerdo esta historia(soné a Wendyxd) en aquellas platicas del clan, pero no tan detallada como ahora la redactas. Sé que comentamos mucho esa noche y creo fue después de contar mi accidente automovilístico xD.

La verdad es que no sé porqué tomaste esa decisión, eso es verdadero compromiso con el trabajo. Y no pensaba que había sido reciente (en aquel entonces que la platicamos)

Yo nunca tuve un encuentro cercano con la muerte pero si he sentido esa inmenda paz.

Asumare...
Yo me he encontrado con videos en youtube donde van personas, tocan los cables y ya se mueren xD
Lo bueno es que no fue tu caso, aunque sí me pregunto, por qué decidiste brincarte la barda?, tal vez llamarle por teléfono al jefe desde tu casa hubiera sido la mejor opción porque al final de cuentas él se había llevado tus llaves. ¿Y en la calle nadie vio tu hazaña? xD

@hide, ahora siento que en persona cuento mis anecdotas a medias XD, y sí, me parece que se las conté despues de que nos contaste lo de tu accidente, por eso se extrañan esas llamadas en skype hasta altas horas de la madrugada. y pues bueno tomé esa decisión porque en ese momento solo tenía en mente terminar el trabajo que nos tenía atorados, supongo que fue por estar encimismado en eso que no me dí cuenta de los cables hasta que fue demaciado tarde. Y esperemos que sigas sin ver a la muerte de frente


@itzii, antes dempezar a escalar la barda me aseguré de que no hubiera nadie viendo, porque no era mi intención mostrarles que se podían meter al taller, con lo de no llamar a mi jefe pues no lo pensé en ese momento pero yo quería terminar mi trabajo y llamarlo no hubiera hecho que dejara de esperar afuera del taller