12-11-2018, 07:19 PM
Lo que parecía que nunca sucedería finalmente ocurrió. En las últimas horas Stan Lee dejó de formar parte del mundo de los vivos y pasó a ocupar su lugar en la mitología de los grandes héroes de la imaginación.
Stanley Martin Lieber, mejor conocido por todos como Stan Lee, nació el 28 de diciembre de 1922 en New York. A los 18 años comenzó a trabajar como ayudante y mensajero en la editorial Timely Comics, que años después se convertiría en la poderosa Marvel Comics.
A los pocos meses de haber cumplido los 20 años debió hacerse cargo de escribir una historia breve para Captain America #3 (mayo, 1941), la cual se tituló Captain America Foils the Traitor's Revenge. Esto marcó tres hitos en la historia del cómic: fue la primera historia escrita por el joven Stanley Lieber, fue la primera vez que el nombre Stan Lee aparecía en un cómic, y fue la primera vez en que el Captain America utilizó su movimiento característico de lanzar el escudo para golpear a un enemigo a la distancia.
De allí en más los éxitos irían llegando uno tras otro de manera progresiva. En sus más de 70 años de carrera Stan Lee colaboró en la creación de más de 400 personajes y cientos de series de cómics, entre los que podemos destacar a Spider-Man, Doctor Strange, X-Men, Iron Man, Thor, The Avengers, Fantastic Four, y un larguísimo etcétera.
Stan trabajó junto a grandes artistas del noveno arte, tanto escritores y editores como ilustradores. Gente de la talla de Jack Kirby, Steve Dikto, Bill Everett, John Buscema, Chris Claremont, Alan Davis... nuevamente, al igual que con los personajes, la lista es interminable.
Por otra parte, su carrera también tuvo puntos álgidos al incursionar en otras ramas del entretenimiento, particularmente en el cine y la televisión, en donde colaboró como productor y asistente artístico de decenas de películas, series y dibujos animados. Aunque seguro que lo que todos recordaremos con más cariño de esta faceta suya serán sus reiterados cameos en películas de Marvel, sin importar de qué estudio fueran.
Más allá de tantos éxitos, Stan Lee debió enfrentar en su carrera más de una controversia por cuestiones creativas, algo que en otras épocas era más habitual dado que las editoriales utilizaban escritores fantasma y dibujantes freelancers, justamente para evitar que les correspondieran derechos de autor por los personajes creados. De todas maneras, es muy probable que la verdad sobre el origen creativo de muchos de estos personajes se vaya a la tumba con el viejo Stan.
Pero aún con estas manchas pendiendo como sombras sobre su historial, es innegable que el legado de este maestro marcó el mundo de los cómics de miles de maneras diferentes. Un verdadero innovador en los conceptos de inclusividad, de combatir la discriminación y de empoderar a los más débiles. Gracias a Stan y escritores como él los héroes comenzaron a tener un lado humano, algo que nos hacía sentirlos más cerca de nosotros, simples mortales sin poderes.
Por esto y por muchas otras razones, no tenemos más que agradecerte. Descansa en paz, viejo maestro.
fuente Vix.com