17-10-2016, 08:12 PM
Esta trágica historia comenzó en 1996. La compañía Game Freak sacó al mercado la primera edición de Pokémon Rojo y de Pokémon Verde. Los informes policiales indican que, durante los meses de verano de ese mismo año, se dieron ciento cuatro casos de suicidio en niños entre siete y doce años.
Se investigó el motivo de su conducta. Los padres afirmaban que sus hijos estaban enganchados al juego. Se analizaron varios cartuchos y en la memoria interna del juego se podía observar que la partida guardada era en Pueblo Lavanda.
Los síntomas que sufrían los niños previamente al suicidio eran inducidos por la música que se escuchaba al entrar en Pueblo Lavanda. La melodía poseía unos picos de intensidad tonal que sólo los niños pre-púberes podían escuchar. La combinación de sonidos estridentes y agobiantes producía en los niños fuertes dolores de cabeza y migrañas acompañadas de insomnio. El siguiente estado era irritabilidad, adicción al juego y sangraban en la nariz. Sufrían náuseas, vómitos y una depresión muy fuerte.
Era esa pérdida de apego a la vida y el malestar físico lo que llevó a muchos al suicidio. Se informó a Game Freak de los supuestos efectos producidos por esa música y corrigieron la melodía en las siguientes versiones del juego, incluidas las versiones de Pokémon Rojo y de Pokémon Azul para Europa y Estados Unidos. La melodía es muy parecida, sólo carece de un supuesto murmullo que causaba melodías bitonales en la canción original, así como los tonos que nosotros ya no podemos escuchar debido a la edad.
Enlace: El síndrome de Pueblo Lavanda.
Se investigó el motivo de su conducta. Los padres afirmaban que sus hijos estaban enganchados al juego. Se analizaron varios cartuchos y en la memoria interna del juego se podía observar que la partida guardada era en Pueblo Lavanda.
Los síntomas que sufrían los niños previamente al suicidio eran inducidos por la música que se escuchaba al entrar en Pueblo Lavanda. La melodía poseía unos picos de intensidad tonal que sólo los niños pre-púberes podían escuchar. La combinación de sonidos estridentes y agobiantes producía en los niños fuertes dolores de cabeza y migrañas acompañadas de insomnio. El siguiente estado era irritabilidad, adicción al juego y sangraban en la nariz. Sufrían náuseas, vómitos y una depresión muy fuerte.
Era esa pérdida de apego a la vida y el malestar físico lo que llevó a muchos al suicidio. Se informó a Game Freak de los supuestos efectos producidos por esa música y corrigieron la melodía en las siguientes versiones del juego, incluidas las versiones de Pokémon Rojo y de Pokémon Azul para Europa y Estados Unidos. La melodía es muy parecida, sólo carece de un supuesto murmullo que causaba melodías bitonales en la canción original, así como los tonos que nosotros ya no podemos escuchar debido a la edad.
Enlace: El síndrome de Pueblo Lavanda.