16-11-2021, 12:54 AM
De niño y no tanto. Me acuerdo a eso de los 12 años cuando mi vieja contaba al paso a otra persona que teníamos un pollito de mascota que se llamaba Juancito. Todo muy lindo, lo llamabas "Juancito, Juancito" y venía caminando rápido. De repente le dijo a esa otra persona que el pobre pollito (ya era un gallo) se murió ahogado en una pileta de una señora a la que se lo había regalado porque en nuestra casa se la pasaba cagando por todas partes y era un chiquero. Yo quedé sorprendido, hasta donde sabía Juancito se había ido al campo con su familia, pero así me enteré de la cruel verdad.
En Papá Noel dejé de creer cuando a los 5 años entró disfrazada de él mi tía y me daba cuenta de acá a Japón que era ella. Supongo que ahí empecé a hacerme preguntas existenciales. En los reyes magos nunca llegué a creer porque me quedaba despierto a la noche para ver si llegaban con los camellos, algo que nunca pasó.
Y para cerrar, de chico creía que ser mayor sería genial...
En Papá Noel dejé de creer cuando a los 5 años entró disfrazada de él mi tía y me daba cuenta de acá a Japón que era ella. Supongo que ahí empecé a hacerme preguntas existenciales. En los reyes magos nunca llegué a creer porque me quedaba despierto a la noche para ver si llegaban con los camellos, algo que nunca pasó.
Y para cerrar, de chico creía que ser mayor sería genial...