17-08-2017, 04:46 AM
“Creo que nos arruino el momento…” –me dijo. “No te preocupes, el regalo puede esperar~ Mejor me voy, Argus debe estar algo llena de trabajo… te veo luego~” –y así sin más, se vistió y se fue. Maldije internamente otra vez, viendo como mi cuerpo seguía… algo calentito aun. Sabía que estaba mal pero… supongo que debe haber una razón.
Me vestí con ropa diferente a la que usaba antes con el disfraz de Yuuto. Eugh, ya ese nombre me da asco escucharlo… 14 años con el mismo nombre falso es horrible. De cualquier manera, me puse algo abrigado ya que no suelo ponerme ropa ligera, y tome una de las bufandas rojas que mi madre dejo en la cama, apenas tocando el suelo con una de sus puntas. “Este color me gusta… es lindo…” –coloque la bufanda lo suficientemente apretada para cubrir mi cuello y salí por la puerta. Tome comida para el camino, ya que para mi suerte no había comido nada. Lo que tome me dio la suficiente energía y me quito el molesto dolor en el estómago que tenía desde hacía rato. Salí hacia el lugar de la prueba, intentado llegar lo más rápido posible, aunque había recordado porque no quería mostrarme… mi maldita apariencia real estaba al descubierto… pero debía participar en esta prueba porque no quería decepcionar a Dianthe, ni a mi madre.
“Así que estoy con Jana, Yumi e Izumi… Y al menos Dian tuvo el gusto de poner ese nombre falso…” –murmure algo malhumorado. Jana era alguien en quien confiaba apenas, no era una chica que tenía una apariencia completamente a fiar. Yumi e Izumi, por otro lado, no tenía la menor idea de sus formas de actuar. Note a mis compañeros de grupo en una cuestión importante sobre el objeto a elegir, y que Jana seria la líder, pero ya habían elegido con anterioridad. “Suerte la mía, no tengo idiotas en mi equipo…” –murmure. No presenté queja alguna. Mis orejas se movieron levemente hacia el otro equipo, y los mire de reojo. Mi cola se movía como un látigo de lado a lado… por alguna razón no me sentía bienvenido aquí…
“La energía de Nekotabi y Kuon… no estoy seguro si Jana puede sentirlas a ambas…” –pensé. Me sentia amenazado... y lo único que quería era irme a casa…