Quise explorar cada rincón de ella,
cada pensamiento, cada umbral
pero solo de ella me lleve su perfume
impregnado en mi pecho
y una cabello enredado en mis dedos.

Hoy no entiendo por que la tristeza
esta naciendo en mi corazón
pensé haberla erradicado en su momento
pero hoy sucumbo de nuevo
ante las lagrimas que caen de mis ojos
mojando el papel donde deseo escribir
al amor, la pasión,
la dicha, el deseo, lo sueños,
pero se me van empeñando,
con las gotas y el frío
que me congela y no tengo abrigo.

Cada letra cuesta un mundo escribir,
la recuerdo en cada verso que escribo,
me siento como el vacío
que está al pie de las montañas,
donde solo se oye el eco
de palabras repetidas.

Me siento agonizado,
gritando de dolor,
emito alaridos que desangran mi alma,
que quiere salir.

Ella me acompaña,
se cuelga por mi ventana esta mañana,
no había un rayo de sol
que iluminase mi vista,
que calentara mi piel,
no hay palabras bonitas que oír,
veo, leo, escucho,
y nada me está llenado.

No sé que pasa,
pero hoy no hace calor, no hay amor,
no hay corazones, no hay alma,
la vida se me desgasta este día,
me toca esperar a ver que
sucede mañana,
si es que despierto mañana
alejado de esta depresión
que ella me trae.